El más reciente informe del Pentágono sobre ovnis incluye cientos de nuevos reportes de fenómenos aéreos no identificados e inexplicables, pero ningún indicio de que sean de origen extraterrestre.
El informe incluye cientos de casos en los que se identificó erróneamente a globos, aves y satélites, así como algunos cuya explicación es más complicada, como una ocasión en la que un avión comercial estuvo a punto de chocar con un objeto misterioso frente a las costas de Nueva York.
Aunque es poco probable que resuelva cualquier debate sobre la existencia de vida extraterrestre, el informe refleja un mayor interés público en el tema y las labores del gobierno para brindar algunas respuestas. El documento se dio a conocer un día después de que miembros de la Cámara de Representantes pidieron mayor transparencia durante una audiencia sobre fenómenos anómalos no identificados, el término que utiliza el gobierno para referirse a los ovnis.
Las labores a nivel federal para estudiar e identificar estos fenómenos se han enfocado en posibles amenazas a la seguridad nacional o a la seguridad aérea y no en sus aspectos de ciencia ficción. Funcionarios de la Oficina de Resolución de Anomalías de Todos los Dominios (AARO por sus iniciales en inglés) —la cual pertenece al Pentágono— han dicho que no hay indicio de que alguno de los casos investigados tenga orígenes extraterrestres.
“Es importante subrayar que, hasta la fecha, la AARO no ha descubierto evidencia alguna de seres, actividad o tecnología extraterrestre”, escribieron los autores del informe.
La revisión del Pentágono abarcó 757 casos en todo el mundo que fueron reportados a las autoridades de Estados Unidos entre el 1 de mayo de 2023 y el 1 de junio de 2024. El total incluye 272 incidentes que ocurrieron antes de ese período, pero que no habían sido reportados previamente.
La gran mayoría de los incidentes reportados ocurrieron en el espacio aéreo, pero 49 de ellos ocurrieron a altitudes estimadas de al menos 100 kilómetros (62 millas), lo cual es considerado como el espacio. Ninguno ocurrió bajo el agua. Entre las personas que presentaron reportes se incluye a pilotos comerciales y militares, así como observadores en tierra.
Los investigadores encontraron explicación para casi 300 de los incidentes. En muchos de los casos, los objetos desconocidos resultaron ser globos, aves, aviones, drones o satélites. Según el documento, el sistema de satélites Starlink de Elon Musk es una fuente cada vez más común, ya que las personas confunden a las cadenas de satélites con ovnis.
Las autoridades no encontraron explicación para cientos de los casos, aunque los autores del informe enfatizaron que esto se debe a menudo a que no hay información suficiente para sacar una conclusión.
No se reportaron lesiones ni accidentes en ninguno de los casos, aunque la tripulación de un vuelo comercial reportó que la aeronave estuvo a punto de chocar contra un “objeto cilíndrico” mientras volaba sobre el océano Atlántico frente a la costa de Nueva York. El incidente sigue bajo investigación.
En otros tres casos, tripulaciones aéreas militares reportaron que fueron seguidas por aeronaves no identificadas, aunque los investigadores no pudieron encontrar evidencia que vincule estas actividades con alguna potencia extranjera.
Entre los testigos que proporcionaron descripciones visuales, los reportes más frecuentes fueron de luces no identificadas u objetos esféricos. Otros informes incluyeron a un testigo que reportó una medusa con luces intermitentes.
Durante la audiencia del miércoles, los legisladores escucharon declaraciones de varios testigos expertos que han estudiado los fenómenos, incluidos dos exoficiales militares. La discusión incluyó preguntas sobre inteligencia alienígena e investigación militar con el uso de tecnología alienígena, así como preocupaciones ante la posibilidad del uso de aeronaves secretas por potencias extranjeras para espiar las instalaciones militares de Estados Unidos.
Los legisladores dijeron que la cantidad de preguntas en torno a los fenómenos anómalos no identificados demuestran la necesidad de que el gobierno estudie de cerca el tema y comparta sus hallazgos con la población.
“Hay algo allá afuera”, dijo el representante republicano Andy Ogles “La pregunta es: ¿Es nuestro, es de alguien más, o es de otro mundo?”.